lunes, 14 de septiembre de 2009

¿Acaso no soy una mujer?

Sojourner Truth era una esclava liberada del Estado de New York. No sabía leer ni escribir, pues estaba prohibido y castigado con la muerte para los esclavos. Sin embargo fue una gran activista y portavoz de los problemas que tenían las mujeres negras, asfixiadas por la exlusión de raza y género, lo cual era también una exclusión de clase.

El movimiento sufragista feminista engordaba día a día, y los últimos años del siglo XIX y principios del XX fueron un continuo pensar y repensar, hacer estrategias y modificarlas sobre la marcha para un feminismo que se consolidaba y al que llegaban mujeres diversas que lo engrandecían.


Sojourner habló en público: "Creo que con esta unión de negros del Sur y de mujeres del Norte, todos hablando de derechos, los hombres blancos se encontraran en un aprieto bastante pronto. Pero ¿de qué están hablando todos aquí? Ese hombre de allí dice que las mujeres necesitan ayuda al subirse a los carruajes, al cruzar las zanjas y deben tener el mejor sitio en todas partes, ¡Pero a mí nadie me ayuda en los carruajes, ni a pasar sobre los charcos, ni me dejan un sitio mejor! ¿Y acaso no soy yo una mujer!
¡Miradme! ¡Mirad mi brazo! He arado y plantado y cosechado, y ningún hombre podía superarme! ¿Y acaso no soy yo una mujer?
He tenido trece hijos, y los vi vender a casi todos como esclavos, y cuando lloraba con el dolor de una madre, ¡nadie, sino Jesús me escuchaba! ¿Y acaso no soy yo una mujer?".



El discurso de Sojourner abría el camino para el desarrollo del feminismo de las mujeres negras (también le daba profundidad al de las mujeres blancas). Nos enseñaba que la inclusión de los más excluidos y marginados nos favorece a todos y todas. También demostraba que las supuestas debilidades naturales de las mujeres o sus incapacidades para según que trabajos o responsabilidades sólo correspondían a disquisiciones absurdas sin fundamentos sólidos e interesadas en mantener los privilegios masculinos.




miércoles, 9 de septiembre de 2009

Curso: Masculinidades y Educación Popular. Intervenciones posibles. Trabajo con hombres y jóvenes.

Objetivos: - Reflexionar sobre la construcción de las identidades masculinas.- Analizar las raíces de la violencia en los hombres, sus efectos en ellos, sus familias y la sociedad, y su relación con la actual crisis socio-económica.- Ir buscando pistas metodológicas que permitan desarrollar el trabajo entre hombres para aportar a los procesos de transformación de las conductas masculinas.

Contenidos: 1. INTRODUCCION: Antecedentes -Expectativas de los participantes - Caracterización de los procesos de educación popular.

2. ELEMENTOS/CARACTERISTICAS FUNDAMENTALES DE LA MASCULINIDAD

3. MASCULINIDAD - DESDE NUESTRAS EXPERIENCIAS DE VIDA, ANALIZAMOS, CRITICAMOS Y DEBATIMOS NUESTRAS IDENTIDADES MASCULINAS

4. MASCULINIDAD: INVESTIGAMOS NUESTROS TEMORES, PREJUICIOS, VERGÜENZAS, PENAS Y MITOS

5. SUPERIORIDAD MASCULINA: ¿MITO O REALIDAD?

6. LA "SUPERIORIDAD" MASCULINA COMO FUENTE DE DISCRIMINACION

Hugo Huberman. Facilitador de Género, paternidades y familias. Educador Popular.Buenos Aires



martes, 8 de septiembre de 2009

Contribuciones de los Programas para hombres que maltratan a sus parejas y ex parejas.

• Representan un campo relativamente nuevo que sigue ofreciendo nuevas ideas y observaciones sobre los hombres que maltratan y cómo ayudarles a detener sus abusos
• Aumentan la vigilancia, el seguimiento y la supervisión de los ofensores que de otra manera serían liberados de una condicionalidad vigilada o probation.
• Ofrecen una alternativa de bajo costo frente a la opción de encarcelar que tiende a sobrecargarse y ser ineficiente (en cuanto a la rehabilitación).
• Envian un mensaje indirecto a la comunidad que los hombres "necesitan y pueden cambiar"
• Impulsan la reforma institucional, especialmente en el sistema de justicia penal
• Sirven como un recurso para muchas mujeres en su búsqueda de ayuda y estrategias contra el abuso de sus parejas masculinas.
• Recogen las observaciones y la información útil acerca de los ofensores para los tribunales y para las mujeres parejas.
• Identifican el no cumplimiento de derivación de los tribunales que es uno de los indicadores más fuertes para volver la reincidencia de la violencia.
• Enseñan a muchos hombres pasos prácticos para detener su abuso y desarrollar más interacciones positivas.



SEMINARIO TALLER PARA FUNCIONARIAS Y FUNCIONARIOS MUNICIPALES


El martes 4 de agosto de este año, PRONOMAS realizó en conjunto con la Oficina de la Mujer el Seminario - Taller: “Primer Encuentro Municipal de Género y Masculinidades: Insumos y Desafíos Para la Construcción de una Política Comunal”. Este fue dirigido por el Psicólogo Social Hugo Huberman quien es experto en masculinidades y paternidades, y trabaja como orientador familiar y educador popular. (para más antecedentes y contactarse personalmente con el Sr. Huberman acceder aca: http://hombrespadresfamilias.blogspot.com/ y http://escueladecrianzas.blogspot.com/


Esta actividad forma parte de una iniciativa comunal desde la Dirección de Desarrollo Comunitario, en el contexto de la Línea Programática de Derechos Humanos y Género Relacional, la cual tiene una proyección para 4 años. El seminario es el inicio de una serie de encuentros de reflexión y capacitación destinados a las funcionarias y funcionarios de nuestra municipalidad de El Bosque.


Fueron dos horas en las cuales se abordaron los temas relativos a masculinidades sensibles y no machistas y a equidad de género, a través de una metodología lúdica, dinámica y participativa. Se contó con la presencia de 84 personas del municipio y la presencia del diario El Ciudadano.


El Sr. Hugo Huberman realizó un breve diagnóstico participativo relativo a la participación de hombres y mujeres en distintas oficinas y departamentos de servicios municipales, constatando la escasa participación masculina, la automarginación de muchos hombres de la paternidad y del cuidado del núcleo familiar.


Nos sensibilizó en torno a la necesida de promover y construir nuevos discursos y nuevas imágenes en torno a la masculinidad, involucrando a hombres, jóvenes y niños en temas de cuidado de su propia salud física, sexual y mental; en la transformación de los vínculos entre los hombres, que posibiliten la intimidad afectiva y psicológica entre hombres y la fraternidad. Para finalmente terminar con la presentación de la Campaña del Lazo Blanco “Hombres comprometidos con el fin de la Violencia hacia las Mujeres”, de una manera simbólica, íntima y afectiva, donde los hombres asistentes hicieron circular una vela mirándose al rostro y adquiriendo el compromiso de no violencia del Lazo Blanco.


Gracias a Hugo Huberman y gracias a cada una y uno de los participantes.




GRUPO DE MASCULINIDADES EN EL BOSQUE

















Nos reunimos entre hombres para reflexionar sobre nuestros comportamientos machistas, y para ver qué podemos hacer en nuestra ciudad, escuela, trabajo.

Para entender por qué los hombres tendemos a ser violentos, abusadores o dominantes con las mujeres, y qué es lo que caracteriza a quienes no lo son.

Buscamos estar atentos a todas las formas de violencia y aprender a identificarlas y oponernos a ellas en la familia, el trabajo, la escuela y la calle.

SOBRE EL QUEHACER DE PRONOMAS

Nuestro Programa surge como una iniciativa municipal con apoyo desde la División de Seguridad Pública del Ministerio del Interior en el mes de Enero del 2009. Surge en un primer momento para dar atención psicológica y educativa a hombres que ejercen violencia contra sus parejas y ex parejas.

A la fecha hemos realizado variadas intervenciones grupales con la comunidad. Abriendo espacios grupales que cumplen el objetivo de promover a través de la reflexión, la participación y el involucramiento nuevas masculinidades basadas en el respeto, la afectividad, la equidad de derechos y libertades entre hombres y mujeres. Es decir, nuevas formas de ser hombres, que estén conectados con su sensibilidad y dispuestos a cambiar las creencias machistas y a desafiar los mandatos y estereotipos de una masculinidad hegemónica tradicional.

Para esto desarrollamos un conjunto de temáticas como la paternidad afectiva, cercana y responsable; la convivencia en pareja sin violencia; las relaciones íntimas, afectivas y sin competitividad entre los varones; la corresponsabilidad de los hombres en las tareas domésticas o domesticidades; la salud masculina y el autocuidado masculino, tanto en lo físico como en lo psicológico; la sexualidad masculina, responsable, respetuosa y cuidadora.

Coordinamos y facilitamos:

- Un taller con dirigentes territoriales, del cual se han realizado 18 sesiones.
- Un taller de 4 sesiones con varones, tanto en la Comunidad Terapéutica Gente Joven como en la Carpe Diem.
- Talleres de sensibilización y promoción de nuevas paternidades con padres que apoyan y acompañan a sus hijos a actividades deportivas impulsadas por la comuna.
- Sesiones de formación con la Oficina Municipal de la Juventud, sobre la intervención con jóvenes hombres y mujeres en temáticas de Género y el prestigioso Proyecto H para Jóvenes.
- Talleres de Género relacional con mujeres participantes de organizaciones sociales de base de mujeres.
- Talleres de convivencia en pareja sin violencia con distintos grupos y en distintos sectores de la comuna.
- Sesiones de Género y Construcción Social en la Escuela para dirigentes comunales y una sesión de Masculinidades como un electivo dentro de la Escuela.
- Estamos acompañando y monitoreando un proyecto municipal en la Villa San Bernardo ganado como Fondo de Iniciativa Comunal, el cual fue denominado por el grupo de hombres que lo crearon como “Machismo: pasado, presente y proyección social”. El cual es una iniciativa para socializar y debatir las temáticas de Género Relacional y Masculinidades entre vecinos y vecinas.
- Un primer Encuentro Municipal de Género y Masculinidades: Insumos y Desafíos para la construcción de una política comunal.

Estamos realizando todas nuestras actividades en torno a la Campaña del lazo Blanco en Chile, de “Hombres comprometidos con el fin de la Violencia hacia las Mujeres”. Donde se abordan todas las formas de violencia propias del Machismo: la violencia contra las mujeres, contra otros hombres y de cada hombre contra sí mismo. Realizaremos en el mes de Octubre el Día de las Masculinidades, día en el que participarán todos los grupos con los que se ha trabajado y se abrirá la temática a toda la comunidad, a través de diversas actividades de difusión, recreación y reflexión.


lunes, 7 de septiembre de 2009

Entrevista de Hugo Huberman a Francisco Aguayo

Paternidades y equidad comienzan a ser parte de un camino de revisión y nuevas complejidades que algunos hombres parecen dispuestos a recorrer en los últimos años. Francisco Aguayo forma parte de ese itinerario en América Latina. Este psicólogo chileno es director de EME, Masculinidades y Equidad de Género, un espacio dedicado a la investigación social y el desarrollo de programas y redes en temas de masculinidades y equidad de género.

Hugo Huberman, Psicólogo Social, Educador y Orientador familiar, también forma parte de estos recorridos y a realizado un camino personal y profesional. Se puede obtener información del quehacer de Hugo y contactarse con el, en Vir.Haciendonos Hombres, padres, familias.





Hugo Huberman:
-¿De qué manera, los estudios y el movimiento de hombres, han traído nuevas conversaciones sobre paternidades y desde que ligazones se articulan?


Francisco Aguayo: Se está conversando cada vez más sobre la paternidad de los hombres, tanto en los medios de comunicación, en la academia, entre activistas, como en la vida cotidiana. Al mismo tiempo debemos escrutar estos discursos y nuevas prácticas. Algunos de ellos traen consigo nuevas formas de disciplinamientos sociales, de culpabilización de algunas personas o identidades, de discriminación. Los estudios sobre hombres y en particular sobre paternidades están aportando desde hace un tiempo en nuestra región a la comprensión del fenómeno de las paternidades, a la visibilización de sus complejidades y a la ampliación de sus bordes. Aun queda mucho camino por recorrer.


H. H.: - ¿Por qué hay muy pocos datos fácticos sobre paternidades en el mundo y no es una variable demasiado registrada?


F. A.: La mayoría de los datos sobre cuidado y crianza son leídos desde la maternidad de las mujeres. Y en los hechos la mayoría de las funciones de cuidado –no solo de niños y niñas sino también de ancianos y enfermos- es realizado por mujeres, muchas veces sin remuneración y con
baja valoración de esas labores.

Por otra parte contamos con algunos datos sobre la paternidad de los varones, los cuales están poco difundidos y escasamente problematizados. Esto se debe en parte a la existencia de un discurso dominante acerca dequienes tendrían que hacerse cargo del cuidado y crianza de las/osniñas/os que plantea que es papel de las mujeres. Este discurso se basa en la tradición y en la naturalización del cuidado: si las mujeres son quienes gestan por nueve meses y luego amamantan, entonces ellas tienen que cuidar.


En realidad los datos sobre el positivo impacto que tiene la presencia involucrada de los hombres en la paternidad no son convenientes para el discurso dominante, son disruptivos, producen ruidos, y atentan contra los privilegios masculinos de mantenerse alejados de las labores decuidado y domésticas y contra los privilegios femeninos como tener mayorcontacto y cercanía con los hijos e hijas.


H. H.: - Los estereotipos, las convenciones, la cultura de los géneros tiende hacia un tipo de paternidades explícitas. ¿Cómo funcionan en esos mandatos los conceptos de filiación, tradición, autoridad?


F. A.: Por un lado, hay una ideología que presiona hacia la valoración de las paternidades heterosexuales dentro de un matrimonio. Todo lo que se aparte de ese modelo tendría menor valoración. Por ejemplo, si no se es padre, o no se es padre biológico la masculinidad de esa persona podría estar en cuestionamiento social.

Por otro lado, el modo como es construida socialmente la paternidad resulta en privilegios para los hombres. Así se observa, por ejemplo, en el privilegio de no cuidar de manera compartida con la madre si ocurre un embarazo, o de poder alejarse de sus hijos o hijas sin tanto castigo social como ocurre en cambio cuando una madre se aleja. De este modo hay más hombres que mujeres que no cuidan de sus hijos o que tienen poco contactos con ellos. Asimismo los hombres aportan menos porcentaje de sus ingresos al ingreso familiar. Finalmente, es preciso decir que este ordenamiento también otorga privilegios para las mujeres – no solo inequidades o desventajas-, como poder estar más cerca de los hijos o hijas, mayor órbita de decisión en la socialización, e incluso a veces la posibilidad de excluir al padre o reemplazarlo por otro.

Considerando lo anterior, las categorías contenidas en la legislación civil suelen reproducir un ordenamiento de roles segregados y complementarios entre hombres y mujeres, con subordinación de la mujer al hombre. En este ordenamiento muchas veces los hombres todavía son considerados principalmente como proveedores económicos. Y la maternidad es considerada asunto de mujeres, lo que se prueba con el fenómeno de las separaciones, ya que tras ellas el cuidado de los hijos suele entregarse socialmente a las madres.


H.H.: - Las paternidades adolescentes, son una realidad hoy ¿que nos podrías decir en referencia a esto?


F. A. : Las paternidades adolescentes son registradas y medidas usualmente desde las maternidades adolescentes. Se trata de un fenómeno muy complejo y de alta implicancia para las biografías de esos padres y madres adolescentes y para el futuro de esos hijos e hijas, dado que las respuestas sociales tienden a fragilizar sus condiciones de desarrollo y oportunidades.

Algunos caminos que me parecen muy importantes en el tema de las paternidades adolescentes son: considerar a los hombres fecundos, educar tempranamente, contar con acceso a buenos servicios de salud y métodos anticonceptivos, considerar que la participación de los hombres como padres es tan importante como la de las mujeres como madres, ofrecer condiciones y apoyos sociales adecuados para el desarrollo tanto del niño/a como de las/os adolescentes, apoyar la consecución de los estudios, apoyar la inserción laboral, etc. Encontramos una alta estigmatización frente a un embarazo adolescente reproduciéndose el ordenamiento segregado de roles según género. Finalmente, los niños y las niñas tienen derecho ser cuidados por ambos, la madre y el padre, estén juntos o separados, sin importar su edad.


H. H.: - Los términos cuidado y domesticidad ¿cómo se relacionan con el tema de paternidades?

F. A. : Me parece estratégico hablar de cuidado en el término más amplio posible, considerando todas las formas de cuidado de otras personas, material y afectivo, y que puede ser ofrecido por cualquiera, desde los padres biológicos hasta cuidadores institucionales. De este modo paternidad y cuidado se relacionan íntimamente.

Por otro lado, observamos un discurso de mayor interés por la participación más activa de los hombres en tanto padres. Sin embargo, este discurso permea hacia las otras funciones domésticas distintas del cuidado de hijos o hijas, como las tareas domésticas, el cuidado de ancianos y de personas con problemas de salud física y mental. Se requiere mayor equidad de género en todas estas dimensiones. Para ello precisamos modificar el orden de género en sus cimientos, y socializar y educar a los hombres en el cuidado de otros. Adicionalmente se requieren mejores condiciones sociales para el cuidado como salarios adecuados, trabajos con adecuada protección y que permitan una mejor conciliación de la tensión entre el trabajo y la familia, entre la sobrevivencia y el cuidado.


H.H.: - ¿Qué tipo de políticas públicas apoyarían a los hombres para un mayor involucramiento en las crianzas de sus hijos e hijas?


F. A. : Todas las políticas que buscan que los hombres estén más involucrados en los procesos de salud sexual y reproductiva y en la paternidad. Desde aquellas para prevenir los embarazos no deseados, pasando por políticas para negociar uso del preservativos o métodos anticonceptivos entre hombres y mujeres, hasta aquellas que buscan decisiones y tareas compartidas en procesos tales como la participación en los controles de embarazo en el sistema de salud, presencia de los padres en el parto, roles compartidos con las madres en el cuidado, crianza y todos los procesos relacionados con alimentar, bañar, educar, cuidar en salud, etc. También las políticas empleo y de protección social que ofrezcan mejores condiciones sociales para el cuidado.